Superar alturas con comodidad y hacer un uso eficiente del espacio es la principal función de las escaleras. Su invención no se atribuye a un solo individuo o civilización específica, sino que evolucionó de forma independiente en varias culturas a lo largo de la historia. Las primeras evidencias de escaleras se encuentran en la antigua Mesopotamia, Egipto y la civilización del Valle del Indo, con ejemplos notables como los zigurats de Mesopotamia y la Gran Pirámide de Guiza. Los griegos y romanos refinaron aún más el diseño, y durante el período medieval, las escaleras en espiral eran comunes en los castillos por sus funciones defensivas. El Renacimiento trajo ejemplos aún más elaborados y decorativos, hechos de piedra, mármol y, más tarde, de hierro y acero. En tiempos modernos, surgieron innovaciones con concreto y componentes prefabricados, reflejando avances en materiales y ingeniería. Las escaleras flotantes, por ejemplo, se han convertido en una tendencia al ampliar visualmente el espacio y mejorar la iluminación natural del ambiente. Se caracterizan por un diseño elegante y minimalista, donde los peldaños parecen flotar en el aire sin soportes visibles y están fijados a una única pared.
Sin embargo, cuando se construyen en concreto armado, las escaleras flotantes requieren un cuidadoso planeamiento estructural. Los peldaños deben estar anclados a una viga diagonal oculta o directamente a la pared portante, y esta viga o pared debe estar dimensionada para soportar los esfuerzos cortantes y de flexión generados por el peso de los peldaños y los usuarios de la escalera. Además, es esencial utilizar barras de acero debidamente posicionadas y entrelazadas dentro de los peldaños y la estructura de soporte para garantizar la integridad estructural y la seguridad de la escalera. El concreto utilizado debe ser de alta resistencia para soportar las cargas y minimizar el riesgo de fisuras. La ejecución debe seguir normas rigurosas de construcción e ingeniería para asegurar tanto la seguridad como la durabilidad de la estructura.
Afortunadamente, ya existen sistemas diseñados especialmente para estos propósitos, reduciendo las complicaciones en obra y, principalmente, los problemas futuros en terminaciones y la aparición de grietas. Es el caso del sistema Floating Stairs, desarrollado por Butech, empresa especializada en soluciones técnicas de Porcelanosa. Este sistema, que cuenta con peldaños en voladizo revestidos en cerámica, ofrece una solución versátil y adaptable a diferentes tipos de paredes, como concreto, ladrillo macizo y chapas metálicas. Incluye una estructura de hierro con acabado lacado y fijación con pernos de anclaje, además de cajas de peldaños hechas en OSB o aluminio, que se entregan listas para su instalación. Los proyectos son personalizables, con medidas que varían de 80 a 120 cm de longitud, un ancho de al menos 28 cm y un espesor superior a 9 mm.
Las peldaños revestidos con cerámica de Butech se fabrican sin juntas visibles, logrando un acabado continuo y elegante que imita la apariencia de un bloque sólido de piedra o madera. Esta característica no solo mejora la estética de las escaleras, sino que también facilita su mantenimiento y limpieza, proporcionando un aspecto impecable y duradero. Otra característica destacada del sistema Floating Stairs es la incorporación de iluminación en la parte inferior de cada peldaño. Utilizando perfiles Pro-light, esta opción aumenta la seguridad al proporcionar una guía visual clara en condiciones de baja luminosidad y añade un elemento estético distintivo, creando un efecto de flotación que resalta la elegancia de las escaleras.
Para asegurar una integración perfecta con diferentes sistemas de barandas, Butech también ofrece un servicio de mecanizado específico en el lateral de cada peldaño. Este proceso garantiza la compatibilidad y cohesión ideal entre los peldaños y el tipo de barandilla elegido por el usuario. Revestidas con cerámicas Porcelanosa, estas escaleras flotantes ofrecen múltiples ventajas en comparación con otros materiales, como la madera. La cerámica es duradera, fácil de mantener y resistente a la humedad y al desgaste, lo que la convierte en una opción superior. Porcelanosa ofrece una amplia variedad de modelos cerámicos, como XLIGHT, STON-KER y PAR-KER, proporcionando diferentes acabados y tonos para las escaleras, lo que refuerza el carácter ligero y dramático de su diseño.
Diseñar escaleras flotantes implica cuidar la estructura, los materiales y la estética. El sistema Floating Stairs ejemplifica cómo estos elementos pueden fusionarse para crear escaleras que no solo cumplen con los requisitos funcionales, sino que también elevan la estética de cualquier espacio. Con opciones de personalización, integración de iluminación y mecanización precisa de barandas, garantizan seguridad, durabilidad y un diseño moderno que destaca.